El evento a últimos minutos cambio de lugar, fue en los generales… que aunque no tienen cerveza de la casa como en el sierra tienen mariachi, claro funciona como rock-ola si no pagas no cantan, y me dio la oportunidad de cantar las mañanitas pos sus «XV años» y una que otra mas. Lo malo es que la cerveza mas digna que tenían era una bohemia lo cual es algo triste si lo comparo con lo que estaba deseando. La semana empezó, las asesorías y el entrenamiento también. Me he quedado dormido en la ultima clase, aun con los chistes algo crueles que contó el catedrático. Espero cuadrar pronto de nuevo en este horario tan incomodo.
Solo algo rompio mi rutina; no se si fue hoy o ayer que mientras estaba en la arboleda dando una asesoría, de Termodinámica por cierto, se acercaron unos chicos a pedir algo de dinero ó algo de comer ya que se dirigían al otro lado y venían desde Guatemala (sino me falla la memoria). La verdad no podía/quise darles en efectivo, ya que lo que tenia de cambio no era significativo y lo que traiga papel moneda me parecía un poco grande para esa necesidad. En cambio le ofrecí que si me esperaba un poco, podía traerle algo caliente de comer. Lo comieron como si pudiera ser la ultima comida que probaran, y de hecho podía ser la ultima.
Ellos venían cruzando toda nuestra nación que por cierto es una de las mas grandes, no se cuanto tiempo puede tomar hacer esa proeza… pero muy posiblemente no sabían del problema en curso, ya saben la ley SB1070 esa muestra de racismo desmedido, y me pregunte mientras les preparaba los alimentos si ¿debía decirles o no?, me pareció que en un instante no podría cambiar su propósito y que muchas veces con la ignorancia de algunas cosas uno puede ser mas feliz. Al despedirse, ya satisfechos (espero), con alegría en el rostro (uno nunca sabe lo poderoso que puede ser un gesto amable) me dijo uno de ellos «nos vemos pronto, espero en la gloria…o en el infierno».
En definitiva es un mundo de contrastes, donde aun en este México (al cual le veo un sin fin de problemas) siguen sin ser mi realidad inmediata, como para estos chicos donde los problemas que me desagradan son una realidad inmediata. No había pasado ni dos días de pedir canciones al mariachi de un lugar donde podía comer cuanto me apeteciera. Esto me deja pensando, de haber otra oportunidad espero no solo poder darles algo de comer sino poder incluso prestar el teléfono para que escuchen a su familia y estos sepan donde andan… no se me ocurrió hasta después de pensar en ello.
Jesús Manuel García 