Si estás con alguien mayor que tú (significativamente), lo sepas o no lo sepas, vivirás a la sombra de algún recuerdo. Y seguramente con el tiempo le remplaces, pero para entonces, ya habrás sufrido los efectos secundarios. Las secuelas.
Solo puedo hablar desde mi mayday, o mi día D (cuya letra es una curiosa coincidencia).